“Pura Sangre” es la obra más personal hasta la fecha del joven cantaor Israel Fernández, en el que nos muestra su visión más íntima del entorno que le rodea y su manera de interactuar con el mundo exterior. Se trata de un trabajo introspectivo en cuanto al contenido, en el que Israel descubre su manera de sentir y relacionarse con su universo más cercano: la familia, la cultura gitana, el amor, la naturaleza, los valores humanos y su yo más profundo.
“Pura Sangre” es un alegato a la verdad, la expresión más vital del artista, una obra que pone de manifiesto aquella máxima que dice que la pureza no es la ausencia de contaminación o mezcla, sino el legado de generaciones culturales y entramados musicales que se funden en un crisol donde reina la certeza de quien interpreta y construye nuevos lenguajes desde la más absoluta verdad y bajo el paraguas de la raíz y el conocimiento.
En lo que se refiere a la parte musical, Israel vuelve a componer cada una de las letras y melodías que conforman los cantes de este disco. Lo hace desde esa base firme y amplia en registros que hereda de la tradición ya la que aporta esa creatividad con la que lleva deslumbrando al mundo del flamenco desde hace años, tanto en sus grabaciones como en sus directores.
Como ya es habitual en sus últimos proyectos, vuelve a apoyarse en uno de los grandes genios del flamenco contemporáneo, el jerezano Diego del Morao, quien produce este trabajo junto a Israel y sigue aportando esa mezcla de tradición y vanguardia al disco. Además de los elementos clásicos del género, “Pura Sangre” transita entre sonoridades experimentales que lo dotan de sofisticación, elegancia e innovación sin restaurarle jondura. Todo ello es fruto de la colaboración en la producción musical de Pional, uno de los músicos más destacados de la escena electrónica nacional e internacional.
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