¿De qué hablamos cuando hablamos de que un grupo es único o diferente? De canciones como “Me vas a perder”, la segunda entrega de Perro en su regreso a la actividad fonográfica tras un tiempo de asueto. ¿Y qué la hace tan especial? Que la estructura del tema no tenga por qué regirse por los cánones clásicos y que, aun así, suene irresistible, familiar y adhesiva. Que pueda combinar, como si nada, una melodía chispeante y juguetona con una letra que desprende inteligencia, melancolía y emoción. Que, en un momento de pánico con la duración de las canciones, ésta se alargue hasta casi cinco minutos que se pasan como un suspiro.
“Me vas a perder” es otra demostración de una banda que ha optado desde siempre por transitar su propia senda creativa, ajena a modas y vaivenes de tendencias que no tienen nada que ver con ellos. Perro son verdad y son de verdad, marcando sus tiempos y proponiendo siempre novedades al oyente, que es tratado con el máximo respeto y complicidad. Una canción que es como un viaje que pasa por diferentes estados de ánimo y paletas sonoras. Va directa a lo más selecto de su repertorio y es candidata desde ya a lo mejor del año.
Dueños de un universo radicalmente propio en el que cualquier referencia se pasaba por su particular batidora de imaginación y creatividad, los tres elepés publicados hasta la fecha por Perro aúnan pop, rock, kraut, ruido, melodía, baile, aires tropicales y mucho más. Su nuevo trabajo, producido y mezclado por el propio grupo junto a Marco A. Velasco en los estudios El Mirador de Alhama de Murcia, supone una vuelta a las raíces que hará las delicias de sus fans. Pronto, más música y más noticias.
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