Coque Tornado fue una ocurrencia de hace 4 años. Cuando todo funcionaba y no había olas de calor, Filomenas o Danas. Ésta última arrasó con el local de ensayo en Toledo hace bien poquito anegando con metro y pico de lodo y agua todos los instrumentos, monitores de estudio, amplificadores, mesa de mezclas... sólo se salvó el póster de Cobra Kai que se lo llevó Ricardo (el último Terremoto) a su casa.
El grupo arrancó con el nombre de Coque Tornado y Los Terremotos al comienzo del fin del encierro aquel pandémico, ensayaban con mascarillas. A veces las finas, a veces las fp2. En octubre del 2021 el bajista se fue a otro grupo y se disolvió el directo. Un mes antes el joven baterista descubriría que no le gustaba tocar: pánico escénico. Coque seguiría sacando discos. El Invisible llegaría para sumarse al Toledano y a todos los sencillos y Eps ya publicados. En el 2022 publicaría “Piantao”, “Busca la paz”, “Hierático” y “Tecnoptimismo”. Estas tres últimas en otro sonido obviando la batería real, tirando de una caja de ritmos. Ese año tocó varios conciertos con otros músicos que también se desencantaron por la falta de público. Con su pelo ya extra largo volvería a darlos a solas llegando a telonear gratis a varios grupos, entre ellos uno en la sala Sol ante 250 personas (de espaldas la mayoría hablando de sus cosas en corrillos), pero fueron a verlo con entradas gratis varios tornaders y el primer bajista, el terremoto primigenio.
En el 2023, en un último coletazo de imposibilismo, se encerró en primavera a hacer canciones, porque es lo único que sabe hacer bien. Lo de dar conciertos sin público o sin banda lo lleva regular, aunque esto último se lo plantea a menudo, quizás se marque un estilo pianoman en su quinto disco. Va por el cuarto. Publicándolo poco a poco. Redención continuó la estela de las anteriores. Y esta que viene “Corazón herido” es más alegre, más pop, pero buscando ese sonido con caja de ritmos tan necesaria a falta de bateristas. Ellos eligen al grupo y no al revés.
“Corazón herido” trata de lo de siempre. Un amor no correspondido. Un corazón roto. El tema más manido de la historia de la canción. Pero ya no queda nada, reza el primer verso. ¿A qué se referirá Coque Tornado? Y ahora sólo queda el dolor de un amor que se acabó ... "se acabó" replican los coros. ¿Qué se acabó? ¿Por qué esta actitud tan derrotista?
¿Acaso está hablando de la música y de todo lo que concierne a Coque Tornado? ¿Acaso fue un poco premonitoria por lo que le sucedió en el local?. Eso sí, hay una frase que deja un claro de luz entre tanta nube gris lluviosa. "Pero sé que algún día...". Hay un atisbo de esperanza. La vida sigue. Esto fue bonito mientras no era atún. Quizá algún día tenga sentido cuando seamos 3 o 4 y demos conciertos bien ensayados con público auténtico. Mientras tanto sólo queda un corazón herido, una redención y un tornado que retorna al pop más bonito, el que se hacía el siglo pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario