En la producción, bailable y plena de energía, se combinan guitarras del universo punk mezcladas con un patrón de son, clave 3-2, resultando una mezcla explosiva a la hora de empujar los pies.
Las voces de Oier Palomo y Sandra Rodríguez nos narran las desventuras de un güey que quiere vender los trastos y artefactos que le estorban en casa. Necesita la plata (parné) para irse a vivir con su novia.
Las guitarras van desarrollando hasta 19 acordes distintos, con enfoque neo-soul, tendencia que se está imponiendo en los últimos tiempos y que supone una vuelta a las raíces armónicas del pop.
La trompeta de Joseba Aparicio nos transporta a los años 50 y a las calles de Artemisa (Pinar del Río, Cuba) ciudad de su admirado Arturo Sandoval y sentimos la brisa caribeña al atardecer mientras nos tomamos un daiquirí tras la dura jornada de trabajo.
Producción muy cuidada por Jagoba Ormaetxea, en su estudio TAOM, de Otxarkoaga - Bilbao, que en los últimos años se está convirtiendo en la revelación de los estudios independientes.
La portada representa una fiesta tradicional en España. Niños corriendo ante un “Toro de fuego”.
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