La Élite, compuesta por Nil Roig (Yung Prado) y David Burgués (Diosito), no pierde tiempo: en menos de un año, han lanzado un segundo álbum, “Directos al Infierno” que completa el ciclo comenzado con “Escaleras al Cielo” Mientras “Escaleras…” nos seducía con influencias pop, este nuevo trabajo retoma su vena más descarnada y visceral, en una travesía synthpunk sin concesiones.
La Élite reescribe las reglas del juego con doce temas cargados de energía cruda y actitud incendiaria, apostando por la autogestión y el “Do It Yourself” bajo el sello Discos Gele, que ellos mismos crearon para respaldar a otros artistas afines.
En “Directos al Infierno” cada canción es un martillazo, una mezcla adictiva de sarcasmo y provocación que invita al pogo y deja huella. Colaboraciones como las de Rojuu, Tetas Frías, Los Pintaos, y Glory Hole añaden una capa de intensidad que potencia la fuerza de un LP electrizante. El humor y la ironía presentes en sus letras dan vida a una colección que navega entre la frustración, el gozo extremo, la vida y la muerte. Al ritmo de su synthpunk retorcido y veloz, La Élite se sumerge en una exploración emocional que abraza las contradicciones humanas, desde la felicidad hasta el más feroz desencanto.
Diosito explica el cambio de rumbo en esta continuación: “En Escaleras… experimentamos más con el pop, y ahora en Directos al Infierno volvemos a nuestro sonido más visceral.” Este regreso a lo esencial es evidente en cada corte: la banda se entrega por completo, sin filtro ni red de seguridad. Con “Directos al Infierno”, La Élite ofrece un grito desafiante y directo que resuena con toda una generación.
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