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martes, 5 de noviembre de 2024

“Te quiero y punto” el nuevo single de Conchita

Conchita vuelve a regalarnos un retrato a los sentimientos. En este caso, le bastan menos de cuatro minutos para recordarnos lo que es tener un buen amigo al lado a través de un relato de empatía 

Pocas palabras dentro de la red del vocabulario castellano merecen más una tilde que ese  que se dirige a alguien especial. A esa persona con quien tienes una conexión especial. Esas amistades que, cuando estás en pleno drama.  

Conchita lo sabe, y ha querido rendir tributo a esas personas que son casa. Que son el refugio para el alma. El tema se llama Te quiero y punto. Descriptivo, clarificador y certero. Un juego de palabras, con ese tono pausado salido de un timbre reconocible, encajadas con la pericia de una de las compositoras más hábiles del panorama nacional. Porque, más allá de lo melódico -en lo que entraremos-, no hay duda de que tiene un don para combinar lo que sacan del diccionario castellano y pasarlo por el filtro de los sentimientos. 

"Menos mal que en este mundo estabas tú", comienza casi con un susurro. Con esa intensidad medida, pero con una carga emocional que se contiene dentro de lo que podría ser un reflejo de una timidez soterrada con esos chispazos de una Conchita divertida en las distancias cortas. "La de risas que pasamos, la de baches que saltamos", canta en ese tramo comedido, generando una empatía con cualquiera. Porque, ¿Quién no tiene una amistad de toda la vida que recuerda y se le dibuja una sonrisa? "Me chivaste aquella tilde en 'tú'", puede ser el fragmento que mejor defina lo que este tema de tres minutos y tres cuartos con dos fases muy bien definidas. 

Porque, aproximadamente a la mitad, a esa calma que inspira la melodía y una voz que mece con la caricia de cada nota, se le aporta un punto más de intensidad. Te invita a mover la cabeza con esa batería que entra fuerte para aportar un 'beat' marcado que dé paso a una estrofa cargada de guiños a Madrid y, por ese acento que le pone, con los visos de una autobiografía. "Ciudad Lineal y su autobús, las risas y el ballet", es el pie que te damos para que identifiques de lo que te hablamos. 

"La de sueños que pusimos defender". Quizás, esa parte dentro de un estribillo que se te va a quedar en la cabeza, sea clave para sostener la estructura del mensaje. De todo lo que cuenta en esa trenza dialéctica en la que no se escapa ni un pelo de uno de los mechones que lo componen. Todo ello, mientras una segunda voz nos recuerda que "no sin mi amiga, te quiero en mi vida". Y con una guitarra eléctrica que se atreve, incluso, a un solo que da un carácter diferencial a un tema de Conchita dentro de ese repertorio que sirve lo mismo para el desamor que para hacer autoterapia y recordarse que hay quererse. El último "y punto", con su voz dejándose ir es el cierre que pide una obra que, no nos cabe duda, va a tener el mismo impacto en las redes sociales que obtuvo con El Viaje. 

Para acompañar al lanzamiento en las plataformas digitales de audio, un vídeo para el que ha contado con la colaboración de sus amigos y de los followers. Un cuadro en el que cada brochazo es un vídeo de exaltación de esa amistad que conduce todo este “Te quiero y punto. Abrazos, brindis, llamadas, vacaciones en el mar, besos... Todos esos gestos, esa foto mental que tenemos en el imaginario colectivo de lo que es la amistad verdadera. Esa que puede llegarse a idealizar, pero que es, exactamente, lo que ha plasmado Conchita en menos de cuatro minutos que llevan de la sonrisa a la lágrima como si estuviésemos estirando y encogiendo una goma. La demostración, aquí abajo.

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