Por fin llega “Balla la masurca!”, el debut de Guillem Gisbert en solitario o, lo que es lo mismo, el disco más esperado de la música en catalán de 2024.
Manel son una página dorada de la historia de la canción en Catalunya y Gisbert su cantante y principal compositor. El anuncio de que el cuarteto barcelonés se iba a tomar un descanso tras la mejor gira de su carrera –la del celebrado “Per la bona gent”– sumió a muchos en una sensación de desamparo hasta que el pasado septiembre los rumores se confirmaron: Gisbert arrancaba proyecto en solitario con el anuncio de un concierto en la Sala Apolo que colgó el cartel de Entradas Agotadas en cuestión de horas.
Más adelante vinieron los avances, “Les dues torres” y “Waltzing Matilda” primero, “Cantiga de Montse”, “Hauries hagut de venir” y “Un home realitzat” después, que disiparon cualquier duda: Gisbert no ha levantado el pie del acelerador, no es Manel, pero ni falta que le hace.
“Balla la masurca!” confirmará a Gisbert –si es que era necesario–, como uno de los grandes compositores españoles de su generación, con once cortes de altísima calidad y unas letras exquisitas al alcance de pocos. El artista barcelonés conoce al dedillo la canción popular y sigue jugando con ella a su antojo, tomándola desde sus más alejados confines y mezclándolos con total naturalidad: del pop contemporáneo más cerebral a un folk narrativo, de la canción orquestal del Siglo XX a la música urbana.
Manel descansan, pero las canciones de Gisbert continúan: bailen ustedes la mazurca y duerman tranquilos.
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